jueves, marzo 12, 2009

La jubilación


Al cumplir la edad de jubilación un hombre se presentó en la Seguridad Social a tramitar su pensión.

La funcionaria detrás de la ventanilla le pidió algún documento para verificar su edad.

El hombre buscó en todos sus bolsillos, pero finalmente cayó en cuenta que los había dejado en casa.

Le dijo a la oficinista que lo sentía mucho, que iría a la casa y volvería más tarde.
En eso, la oficinista le dijo:
'Desabotónese la camisa'.
El hombre lo hizo y mostró los vellos canosos de su pecho.
'Esos vellos canosos son prueba suficiente para mí', dijo la mujer y procesó la solicitud.

Cuando el hombre regresó a casa, emocionado le contó a su esposa lo que le había sucedido.
Comentó entonces ella:

'¡¡¡Debiste bajarte los pantalones. A lo mejor también te DABAN una pensión por invalidez!!!'.

No hay comentarios: